...Vete tranquila sigue, busca otro mundo

Cuando te das cuenta que una ciudad que no es la tuya te ha dado ya todo lo que te podía dar, cuando ves que pases por la calle que pases te matan los recuerdos, que en cada lugar ves una escena, cuando has sido tremendamente feliz y tremendamente desgraciada, cuando te das cuenta que has reído mucho, llorado mucho, soñado mucho, salido mucho, trabajado mucho, divertido mucho y sobretodo vivido mucho es que ya no te queda mucho por hacer allí.

He exprimido Valladolid al máximo, he conocido a mucha gente, a mucha que seguiré teniendo en mi vida pase el tiempo que pase, a mucha que no volveré a ver nunca y a alguno que no volveré a ver a pesar de que me entristezca que sea así.

He recorrido todos los rincones, he encontrado mi lugar favorito, he llegado a sentirla parte de mi, mi cachito de pucelana, algo que llevaré siempre conmigo.

Pero todo se acaba y antes de que algo te ahogue tanto que te quede un mal recuerdo, es mejor irse.

Ha llegado el momento de salir de aquí, de cambiar de vida y de lugar, de empezar de nuevo, de crear nuevos recuerdos, de que todo suene a novedad, volver a sentir ese miedo mezclado con ganas que sentí al bajar del tren con la maleta la primera vez que vine a esta ciudad y sentir la tristeza que da irse de un sitio sabiendo que solo volverás en alguna escapada de un día o dos.

 

Aprovecharé mis últimas semanas aquí, tratare de volver a verlo todo con los ojos de la primera vez, sabiendo que es la última.

 

 

Goodbye Pucela, goodbye…

 

VIVE...